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MUNICIPIO DE CATACAMAS

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DATOS HISTÓRICOS:
No se sabe la fecha de su fundación, solamente que en 1770 ya tenía arreglados sus ejidos.
En el recuento de población de 1791 está san Francisco Catacamas, formando parte del curato de Manto y en la división política territorial de 1889 era uno de los municipios del distrito de Juticalpa.
El 24 de enero de 1898 se le confirió el título de ciudad.

ORIGEN DE SU NOMBRE: la palabra Catacamas, parece ser atiacamaní, uno de los nombres que tenía la diosa del agua entre los aztecas.

DATOS GENERALES

SITUACION: este municipio está situado en el hermoso valle de Juticalpa y allí toma el nombre de Catacamas y su cabecera en el valle de Olancho.

LIMITES: al norte, municipios de Gualaco, San Esteban y Dulce Nombre de Culmi; al sur, municipio Danlí y república de Nicaragua; al este municipio de Dulce Nombre de Culmi y república de Nicaragua y al oeste, municipios Santa María del Real, San Francisco Becerra, Juticalpa y Gualaco.
EXTENSION TERRITORIAL: 7261.2 km².
FERIA PATRONAL: el 4 de octubre, día de San Francisco.
ALDEAS: 13
CASERIOS: 24
POBLACIÓN: 110,900 habitantes.

Catacamas es una ciudad pintoresca que aun conserva su sabor rural olanchano. Su proximidad al parque arqueológico cuevas de talgua lo ha puesto en el mapa turístico de honduras, sin embargo, ofrece alternativas para visitar el parque nacional sierra de Agalta, es la puerta de entrada a la biosfera del río plátano por Dulce Nombre de Culmi y al parque nacional patuca. Catacamas cuenta con una bonita iglesia colonial, dedicada a san francisco de asís, y el edificio de la alcaldía aun mantiene su arquitectura original, tan típica del ambiente rural hondureño. Cuenta con dos bonitas plazas y tiene una imponente cruz construida en lo alto de un cerro aledaño a la ciudad, desde el cual se tiene una imponente vista de Catacamas y buena parte del valle del río Guayape. Según informes, el acceso por las gradas hasta la cruz cuenta con más de 600 gradas, así que recomendamos que se tome su tiempo en el ascenso.


El río Guayape tiene una legendaria fama por la importante cantidad de pepitas de oro que a lo largo de los años se ha rescatado de su lecho. De hecho, hasta el día de hoy se pueden encontrar personas haciendo su trabajo de lavado en el río, actividad que les genera los ingresos necesarios para subsistir. El ambiente rural de Catacamas es complementado por dos importantes escuelas agrícolas que están ubicadas en esta ciudad: la Escuela Nacional Agraria tiene fama que traspasa las fronteras nacionales, La Escuela de El Sembrador es igualmente importante.


EXCURSIONES Y PASEOS ARRIBA


Olancho ofrece muchas alternativas para ir de excursión. Desde áreas protegidas y parques nacionales, pasando por comunidades típicas y terminando con las cuevas de talgua, hay algo para todos los intereses y con diversos grados de dificultad. A continuación detallamos una lista de las opciones más interesantes a nuestro parecer:




CUEVAS DE TALGUA SIGUEN OCULTANDO LOS MISTERIOS DE UN PASADO
Catacamas, Honduras.- el enigma de la sierra de Agalta guardado por 500 años después del arribo de los colonizadores europeos, aún sigue ocultando celosamente los misterios de una de las primeras civilizaciones de América que se establecieron en las ubérrimas pampas olanchanas, hace 900 años antes de Cristo.


A siete kilómetros al occidente de esta ciudad, entre la agreste vegetación y las cristalinas aguas
Entrada a la cueva principal del río talgua se encuentran restos de un pueblo que, según las primeras pruebas científicas realizadas a las osamentas, datan de los años 800 y 900 años a.c.
Como si existiese un pacto entre la naturaleza y los antepasados el bosque trata de ocultar la gruta donde se conservan intactas las huellas de un pasado lejano que se resiste a revelar al mundo la forma de vida de los primeros pueblos de América.
Lo que hace 900 años a.c fue un refugio y campo santo de los aborígenes ahora se le conoce mundialmente como las cuevas de talgua, descubiertas en 1994. Las osamentas y las vasijas encontradas en el lugar impresionaron a los científicos, pero lo que más llamó su atención fueron los cráneos luminosos, considerados como únicos hallazgos en el mundo.
La cripta parece haber sido diseñada por la naturaleza con cámaras y salas para que los moradores tuvieran las comodidades para vivir, para practicar sus ritos y sepultar a sus muertos.
Actualmente sólo se puede acceder a la gruta unos 500 metros, lo suficiente para trasladarse a un mundo que resulta incomprensible para las mentes globalizadas por la tecnología.
Los científicos hablan de que las majestuosidad de esta cavidad natural se moldeó hace aproximadamente un millón de años por las corrientes subterráneas del río pinabete, el que al abandonar las profundidades de la colina se funde con el río talgua.
En el tramo habilitado para ser visitado se puede disfrutar de infinidad de formaciones rocosas diseñadas a través de los tiempos en forma de figuras de catedrales, saurios, retratos de imágenes sagradas y diabólicas. Dentro de la cripta todo queda a la imaginación del turista. Una de las cosas más bellas e impactantes son las formaciones llamadas estalactita y estalagmita formadas por la pérdida de agua ácida que disuelve la roca caliza.
Relata el guía de turistas Ramón Santos que la composición de la gruta es de roca caliza, mineral muy frágil para ser penetrado por aguas ácidas desde la parte superior. De esta manea se formó este monumento natural, convertido hoy en testigo mudo de las civilizaciones que poblaron la tierra.
No se sabe a que cultura pertenecieron sus habitantes. Lo único que se puede saber por ahora es que estos seres vivieron entre 800 y 900 años antes de Cristo. Se ha constatado que los huesos se mantienen en buen estado debido a los minerales que fluyen incesantemente de la cima hacia el extraño río.
Sobre su vida se han creado varias presunciones, la manejada por los pobladores de la zona es que los indios moraban a dos kilómetros de las cuevas y al morir realizaban un ritual de despedida luego uno de los indios desmembraba el cuerpo del fallecido, descarnaba los huesos y luego los colocaba ordenadamente en la cueva. Ellos creían que si el cuerpo era sepultado entero y fuera de la cueva volvería al mundo de los vivos.
En el interior de la caverna existen tres sepulturas individuales que se especula pertenecieron a individuos de alta relevancia en la comunidad primitiva del departamento de Olancho, el más grande y fértil de honduras.
Ellos consideraban el interior de la caverna como un “inframundo” donde podían tener contacto con los dioses de la naturaleza, de ahí que el lúgubre sitio se considera región sagrada.
Cuando en 1994, Desiderio Reyes y Jorge Yánez entraron por primera a la gruta, encontraron 23 tumbas con un promedio de 250 a 300 cadáveres desarticulados y distribuidos en diversos sitios. En el hallazgo se incluyen además, múltiples vasijas y jarrones de cerámica que utilizaban como ofrendas a sus deidades al momento de depositar las osamentas.
Un grupo de científicos trabaja después de los 500 metros a los que tiene acceso el público, buscando descifrar los enigmas del pasado. Ellos son del criterio que sus investigaciones podrían llevarlos a encontrar la llave que les abra la puerta acerca de los secretos de civilizaciones desarrolladas en América en la era precolombina.
Por los elementos encontrados en el lugar, los estudiosos, creen que entre la civilización de la sierra de Agalta y los mayas de Copán, se estima que existieron puntos de contacto entre ambas. La convergencia más próxima es la existencia de una sala ceremonial en los lugares consagrados para contactar con las divinidades.
A las osamentas se les conoce como las “calaveras luminosas” por el intenso fulgor que expelen. Este raro resplandor se genera por el pigmento rojizo que están cubiertos los huesos, paredes y pisos de las cavernas y por el resplandor generado por los cristales de calcita diseminados por todas partes.
En la revista América de julio/agosto de 1995, aparece una publicación sobre este fenomenal descubrimiento. En la misma se plasma una información acerca de que en 1674 vino a estas tierras el sacerdote misionero español, Fernando Espino, quien escribió que en Olancho existieron 200 naciones e idiomas diferentes.
Luego de su descubrimiento, el gobierno inició los trabajos para convertir las cuevas de talgua en uno de los centros turísticos del país, pero los trabajos fueron destruidos por el huracán Mitch. Hoy nuevamente una decena de trabajadores del estado laboran nuevamente en el acondicionamiento del lugar para atraer nuevamente el turismo.

ACCESO Y HORARIO
El parque arqueológico cuevas de talgua está ubicado a unos 10 km de Catacamas. El camino de acceso es de tierra, y según la época del año, puede estar en excelentes condiciones a algo deteriorado. De cualquier modo, el caso es que un vehículo de tracción sencilla es suficiente para llegar a este interesante sitio.
Situado en la rivera del río talgua, y en zona de amortiguamiento del parque nacional sierra de Agalta, este parque ofrece una experiencia ecológica y de aventura más que de arqueología. A pesar de contener restos humanos de suma importancia, la verdad es que estos no están accesibles al público, por lo que la experiencia arqueológica se limitará al pequeño museo y algunos montículos que se encuentran en la rivera opuesta del río.
Sin embargo, el sitio es de gran interés por las cuevas, la infraestructura ya habilitada que permite entrar hasta 500 metros en la cueva principal y por la vegetación del sitio. Desde él parqueo, hay que caminar unos 500 metros hasta el centro de visitantes, que contiene un pequeño museo, una cafetería y unos baños.
El acceso al parque tiene un costo de $5.00 usa dólares por extranjero o lps. 25.00 para nacionales. si no tiene auto, puede tomar el bus que sale de Catacamas a talgua a las 6:00 a.m. hay otro que sale a las 11:00 a.m., sin embargo el último que sale de talgua hacia Catacamas sale a las 13:00 hrs. por lo cual le aconsejamos tomar el de las 6:00 a.m. el parque permanece abierto desde las 8:00 a.m. hasta las 4:00 p.m. es recomendable traer una buena linterna y zapatos apropiados ya que el camino dentro de la cueva puede ser resbaloso por la humedad dentro de la cueva. La cueva principal tiene luz eléctrica, sin embargo es conveniente la linterna por aquello de algún apagón en el servicio eléctrico. El servicio de guía tiene un valor de lps. 5.00 por persona y solo lo hay en español. El sendero dentro de la cueva es un andamio elevado, el cual va arriba de una pequeña quebrada de agua la mayoría del tiempo. La cueva está muy bien iluminada y se pueden apreciar múltiples formas de estalactitas y estalagmitas. Existen algunas grandes bóvedas con hermosas formaciones.
En el área del centro de visitantes hay un pequeño restaurante que sirve refrescos embotellados y una selección de comida típica. Hay otras cuevas cercanas que también pueden ser visitadas, sin embargo no tienen ninguna infraestructura. La cueva más grande se encuentra a 1 ½ km del centro de visitantes, por un sendero que le llevara recorrer unos 45 minutos. Desde el final de la cueva principal se puede acceder a un túnel que sale más arriba en el río talgua. Este no está iluminado ni señalizado, por lo que no se recomienda intentar introducirse en él sin un guía apropiado, el cual puede ser contratado en el centro de visitantes. Según nos informan, desde aquí es posible subir al cerro “la picucha” el punto mas alto del parque nacional sierra de Agalta y cuarto pico mas alto de Honduras. El camino es muy empinado y llevará aproximadamente 2 días para subir y bajar.